Los amantes de los felinos saben que son muchos los falsos mitos de los gatos que todos damos por válidos. En este post queremos desterrar estas creencias para evitar malentendidos. Así podremos comprender y convivir mejor con nuestros queridos amigos.
Falsos mitos de los gatos: qué hay de verdad
Primer mito: la esterilización provoca obesidad
Sí, después de ser esterilizado, un gato puede aumentar de peso, pero la causa directa no es el propio proceso de esterilización.
¿Qué hace que un gato gane kilos? Pues, básicamente, lo mismo que les ocurre a los humanos: falta de ejercicio y mala alimentación, entre otros motivos.
Un gato esterilizado necesita seguir moviéndose para mantenerse ágil y cuidar su salud. Además, hay que asegurarse de que mantiene una dieta equilibrada, solo así tendrá una vida larga y sana sin problemas de sobrepeso.
Segundo mito: los gatos domésticos tienen ‘poderes sobrenaturales’
La percepción de los felinos está mucho más desarrollada que la nuestra. Ellos pueden distinguir cosas que nosotros no, pero eso no significa que sean capaces de generar fenómenos paranormales.
Simplemente, los felinos perciben cualquier pequeño cambio y reaccionan al instante, cosa que nos puede provocar envidia, pero no debería darnos miedo.
Tercer mito: los gatos buscan la soledad
No, no tienen tanto afán por quedarse solos como pensamos. Son independientes y muy resolutivos: se las arreglan muy bien sin ayuda, pero eso no quiere decir que no les guste la compañía.
Cuarto mito: los gatos son especialmente adecuados para gente que pasa poco tiempo en casa
Los gatos no son peluches: necesitan afecto y cuidados, aunque puedan ser más independientes que otros animales, como los perros.
Quinto mito: ¿ronronear significa siempre que los gatos están especialmente cómodos?
Este es otro de los falsos mitos de los gatos. El ronroneo es una forma de expresión que tiene distintos significados: confort, paz, afecto, miedo, entre ellas. Es decir, que no solo ronronean cuando se sienten cómodos.
Sexto mito: no se puede adiestrar a los gatos domésticos
No es cierto; se les puede con paciencia, empatía y cariño. Entrenarles para convivir castigándoles no tendría sentido. Prueba con golosinas, nuevos rascadores, alternativas de juego, etc.
Séptimo mito: los gatos abandonados sobreviven en la naturaleza
Esta es una de las creencias que más daño ha hecho a los gatos. Aunque, como decíamos en el punto anterior, los gatos saben cómo salir de situaciones peligrosas, el abandono de gatos domésticos tiene consecuencias muy graves. Un felino que llega a la naturaleza después de haber sido domesticado suele fallecer por inanición.
Octavo mito: los gatos nunca no se desorientan
Muchas veces nos asombramos de cómo nuestros gatos siempre encuentran el camino de vuelta, incluso en entornos nuevos. Sin embargo, los investigadores establecen un radio de un kilómetro en el que los gatos pueden orientarse.
En distancias mayores, los gatos no desarrollan un sentido de la orientación especialmente bueno y pueden perderse, por eso es muy recomendable tenerlos localizados con un GPS para mascotas.
Con nuestro GPS para gatos podrás rastrear a tu mascota durante tres días y quedarte tranquilo. El localizador incluye una tarjeta SIM y nuestro Portal Finder. Para completar el servicio, se puede utilizar nuestra aplicación para iOS y Android para encontrar a nuestro preciado gato.
Noveno mito: los gatos son traicioneros
Quien diga que un gato es traicionero lo juzga desde la perspectiva humana y no es cierto. Los gatos son animales a los que hemos ido domesticando, pero que aún mantienen los impulsos propios del cazador solitario. Su instinto y su tendencia a defender su espacio propio lo llevan a evitar el contacto con otros animales o humanos desconocidos para él. Es decir, el gato simplemente desconfía de quien puede quitarle alguna de sus “presas”. A pesar de ser animales domésticos, conservan su instinto salvaje.
Pero la personalidad de un gato depende de su crianza, socialización y experiencias. Los gatos pueden ser cariñosos, leales y afectuosos con sus dueños si se les trata adecuadamente.
Décimo mito: los gatos tienen 7 vidas y siempre caen de pie
El falso mito de los gatos por excelencia: los mininos no siempre pueden caer de pie ni salir ilesos tras una caída. Son animales muy flexibles y cuentan con el reflejo del enderezamiento, que desarrollan a partir de las tres semanas de vida. Y a una determinada altura, suelen adoptar la postura adecuada para amortiguar el impacto y caer de pie; pero a menor altura, no les da tiempo a girarse sobre sí mismos: no son paracaidistas.
De todas formas, aunque caigan de pie, y sea cual sea la altura, los gatos pueden lesionarse y no es cierto que tengan siete vidas, como dice otro de los falsos mitos.
En definitiva, muchos mitos de los gatos son falsos, por eso es importante cuestionárselos. Lo más relevante es que pensemos en nuestras mascotas como en nosotros: no todos los gatos son iguales, cada uno tiene sus necesidades. Conocer en profundidad a tu gato hará que seáis los dos más felices.