A pesar del COVID-19, la esperanza de vida en España continúa en aumento. Y con esta longevidad ahora el foco no está tanto en añadir años a la vida, sino en tener la mejor vida posible en esos años. Aunque muchas enfermedades no se pueden prevenir, gracias a los avances tecnológicos sí que podemos evitar algunas de sus consecuencias negativas para mejorar la calidad de vida. Un ejemplo son los localizadores GPS para personas mayores, una gran herramienta para aquellos que sufren algún tipo de demencia o Alzheimer.
Crece la esperanza de vida, y también algunas enfermedades neurodegenerativas
La proporción de personas mayores de 65 años casi se duplicará en las próximas dos décadas, creando desafíos a medida que aumentan las demandas de atención y cambian las tasas de dependencia.
Y con el aumento de la esperanza de vida, unas de las enfermedades que más están aumentando entre nuestros mayores son la demencia senil y el Alzheimer. Desgraciadamente, se trata de enfermedades que no solo están unidas al envejecimiento, sino que pueden afectar también a personas más jóvenes.
Una de cada tres personas mayor de 85 años tiene Alzheimer
Una de cada nueve personas mayor de 65 años y una de cada tres de más de 85 tienen Alzheimer, según un informe de la Fundación Caser. Se trata de una enfermedad neurodegenerativa que padecen más de 30 millones de personas en el mundo.
El Alzheimer es una enfermedad degenerativa del cerebro que afecta a la memoria, al pensamiento y a la capacidad de orientación espacial de quienes la padecen. Se desconocen las causas concretas que provocan la enfermedad, que pueden ser tanto genéticas como no genéticas.
Muchos de los cambios neurológicos del Alzheimer son los mismos del proceso neurológico normal de envejecimiento. La diferencia radica en que las transformaciones que se producen son más llamativas y se extienden también a otras áreas
Las dos principales alteraciones que podemos observar en el cerebro de una persona con Alzheimer son la pérdida neuronal (las neuronas se mueren con mayor rapidez de lo habitual en el proceso de envejecimiento) y la destrucción de sinapsis (conexiones entre neuronas) en el hipocampo y la corteza cerebral.
Otra enfermedad similar que afecta a las personas mayores y que es un trastorno neurocognitivo mayor es la demencia senil. Se trata de un síndrome que se caracteriza por el deterioro de las capacidades psíquicas de la persona y que afectan a la memoria, el pensamiento y las habilidades sociales.
Ambas enfermedades, Alzheimer y Demencia, son distintas, pero están íntimamente relacionadas porque el Alzheimer es la principal causa de demencia.
Las personas que padecen estas enfermedades son muy vulnerables y se desorientan, por lo que requieren una atención cercana. Se trata de una preocupación creciente en el mundo moderno, ya que las familias se reducen y cuidar de nuestros mayores se hace cada vez más difícil.
GPS para personas mayores: una herramienta que puede mejorar la vida de pacientes con demencia o Alzheimer
Hay varias razones socioeconómicas detrás de esta tendencia, pero no podemos ignorar el hecho de que este tipo de problemas tienen soluciones de la nueva era con la ayuda de la tecnología.
En los países más desarrollados existen residencias para enfermos de demencia que tienen en cuenta el bienestar mental de quienes la padecen. Estos espacios vitales están diseñados para ser acogedores, fáciles de recorrer y no presentan los riesgos de los espacios públicos que podrían confundir a las personas con estas enfermedades.
Pero también hay personas a las que esta enfermedad no ha afectado de forma muy severa, que continúan viviendo en su domicilio y haciendo una vida relativamente normal. Los localizadores GPS para personas mayores pueden facilitar la vida de cuidadores, familiares y pacientes con demencia o Alzheimer cuando se desorientan y se pierden.
¿Cómo ayuda un localizador GPS a personas con enfermedades neurodegenerativas?
Veamos cómo ayuda un localizador GPS en la vida diaria este tipo de pacientes y cómo puede mejorar su vida social sin obstaculizar su movilidad reducida y su interacción con los demás.
Uno de los problemas que más preocupan a los cuidadores o familiares cuando atienden a personas con demencia o Alzheimer es su movilidad. Dado que existe un alto riesgo de que se pierdan y no sean capaces de encontrar el camino de vuelta a casa, este tipo de pacientes suelen estar confinados en sus casas e incluso encerrados en ellas.
Sin embargo, hay estudios que sugieren que la interacción social y el tiempo al aire libre pueden se buenos para ralentizar la propagación del daño cerebral. Llevar un rastreador personal todo el tiempo les permite moverse y hacer una vida más saludable.
Este tipo de dispositivos se colocan en la ropa de estas personas mayores y permiten tenerles localizados en todo momento. El aparato recibe señales de los satélites GPS y mide las coordenadas de ubicación a las que se puede acceder a través de un portal web o una aplicación.
Otras funcionalidades de los GPS: botón SOS y límites virtuales
Los GPS para personas mayores tienen otra función muy interesante. Se puede establecer un límite virtual alrededor de una vivienda y cada vez que el localizador de la persona traspase ese límite, los familiares o cuidadores reciben una notificación instantánea.
Encontrar el camino de vuelta o averiguar su ubicación si se alejan es otra preocupación cuando se trata de pacientes con demencia. Si se desplazan, la pérdida de memoria puede causar confusión y es posible que no reconozcan el camino de vuelta y acaben perdidos en la calle.
Los actuales localizadores GPS para personas mayores como el de PAJ GPS también vienen con un botón SOS específico que se puede utilizar en caso de emergencia. Envía alertas a los primeros intervinientes, como la policía o el hospital, y también notifica a los contactos principales. Resulta muy útil ante emergencias sanitarias: en el caso de que una persona con demencia o Alzheimer se encuentre en peligro o sufra una emergencia médica, los localizadores GPS facilitan la localización y el rescate inmediato. Esto es especialmente crucial en casos de deterioro cognitivo grave, en los que el paciente puede tener dificultades para comunicarse o pedir ayuda.
En resumen los localizadores GPS para personas con Alzheimer tienen grandes ventajas ya que permiten:
- Saber la ubicación exacta de la persona en todo momento.
- Definir una zona de seguridad y enviar alertas si la persona sale o entra de ella.
- Tener un botón de SOS para que pueda pulsarlo en caso de necesidad.
- Saber las rutas y recorridos que hace esa persona y si tiene algún cuidador a su cargo, comprobar que realiza con el enfermo los paseos de rigor.
Es importante saber que para usar estos dispositivos GPS con las personas mayores debe haber un consentimiento claro de la persona afectada. No obstante, en casos excepcionales, puede bastar con un poder notarial de los familiares.
En cualquier caso, es bueno que sepamos que existen tecnologías como los localizadores GPS para personas mayores con demencia o Alzheimer que pueden mejorar la calidad de vida de quienes sufren este tipo de enfermedades.