Un localizador GPS oculto en el coche lo protege de robos

Los dispositivos rastreadores que utilizan la tecnología GPS se han desarrollado y mejorado en los últimos años, aportando nuevos beneficios para distintas funcionalidades. Una de las armas más eficaces para proteger nuestro vehículo de los robos es instalar de forma discreta un localizador GPS oculto en el coche.

Una de las claves para que un localizador sea efectivo y que nos permita localizar rápidamente nuestro vehículo en caso de sustracción es que los ladrones no detecten su existencia. Para ello el aparato tiene que estar bien escondido.

En el caso de que el coche se ponga en movimiento sin nuestra voluntad, el dispositivo nos avisa a través de una alarma en nuestro teléfono móvil o en nuestro ordenador o tablet. A través del Finder, podemos realizar un seguimiento en tiempo real de su ubicación y así saber dónde está nuestro vehículo para informar a la policía de su paradero y poder recuperarlo cuanto antes.

Existen varias opciones para instalar un localizador oculto en el coche

Dependiendo de cada necesidad, existen varios modelos de localizadores GPS para instalar ocultos en el coche y todos ellos son igual de eficaces. Algunos se instalan de forma permanente y van conectados a la batería del vehículo; otros cuentan con alimentación propia y es necesario recargarlos cada cierto tiempo. Estos últimos tienen la ventaja de que pueden trasladarse de un vehículo a otro fácilmente.

El CAR OBD Finder 4G 2.0 se conecta a través de la interfaz OBD 2 que instalan la mayor parte de los fabricantes y envía un mensaje de alarma en cuanto el dispositivo se desconecta de la alimentación externa.

El Vehicle Finder 4G 1.0 tiene un cable corto, de 40 cm, para conectar a la batería del vehículo y cuenta con una batería interna de 12 horas de duración en caso de corte del suministro. Este mismo localizador GPS también puede adquirirse en su versión 2.0 con un cable de 1,5 metros para poderlo instalar de forma oculta y hacer más difícil que los ladrones puedan detectarlo. Tiene unos leds débiles que emiten muy poca luz de forma intencionada para evitar que el aparato pueda ser detectado.

Y dentro de los localizadores GPS portátiles, un modelo muy versátil es el Power Finder 4G, un dispositivo que tiene una autonomía de 90 días en modo espera y que no va instalado con cable. Esto permite que el localizador GPS pueda ir oculto en diversos lugares del vehículo y que pueda trasladarse fácilmente de uno a otro coche o utilizarse para ocultar en equipajes, por ejemplo, y poder localizar la maleta en caso de extravío.

Fácilmente recargables y aptos para distintas funcionalidades

Todos nuestros localizadores GPS portátiles se recargan fácilmente y se pueden usar para controlar los movimientos de un vehículo en tiempo real, a la vez que ofrecen el registro completo de todos los itinerarios realizados. Desde el Finder o panel de control se pueden configurar distintos tipos de alertas, establecer zonas perimetrales y controlar la situación del localizador de forma remota desde su ordenador o smartphone.

PAJ GPS es una compañía que está a la vanguardia en el desarrollo de localizadores GPS para que, sea lo que sea que necesite rastrear, haya un aparato con el tamaño, prestaciones y duración de la batería adecuados a todas las necesidades: instalarlo oculto en un vehículo, llevarlo en nuestras excursiones, tener localizadas a personas (niños, familiares con demencia senil, etc.) e incluso para alertar de situaciones de emergencia.

No hay duda de que un localizador GPS oculto en el coche lo protege de robos. Y elegir un lugar discreto para ocultarlo es muy importante para que no sea detectado por los ladrones.  Compruebe después de instalarlo que la señal llega con suficiente intensidad. Y ya podrá dormir tranquilo: su vehículo siempre estará localizado.